La técnica consiste en someter a los embriones a un medio crioprotector, ser congelados a temperaturas bajo 0ºC y luego almacenarlos en nitrógeno líquido a -196ºC; permitiendo que los mismos mantengan sus propiedades intactas.
El semen eyaculado contiene espermatozoides móviles e inmóviles, células no espermáticas, gránulos, debris y factores bioquímicos que pueden afectar la capacidad fecundante del espermatozoide.
El hatching asistido consiste en realizar un agujero pequeño a la zona pelúcida con pulsos de láser y ayudar a que el embrión eclosione de su cubierta e implante en el endometrio uterino.